(article disponible només en castellà)

El pasado 28 de setiembre la Sala Constitucional de Costa Rica derogó el reglamento de uso de suelos del Refugio de Vida Silvestre Ostional (RVSO).En este se encuentra lasegunda playa más importante del mundo para el anidamiento de tortugas marinas. Aunquela totalidad de la sentencia 2022-22606 no se ha hecho pública, en la conclusión la Corte Suprema comunica que por vicios procedimentales y falta de sustento técnico quedan sin efecto la Ley 9348 del año 2016 y el decreto ejecutivo 41.134-MINAE del 2018.

Con esta acción, la Sala Constitucional atenta contra el modelo de co-gestión territorial entre comunidad, academia, el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC) y diversas instituciones públicas, que ha caracteriza el funcionamiento del Refugio. De quedar en firme la sentencia, la Ley y el Decreto anulados dejarían sin efecto el actual régimen especial de concesiones que prioriza la ocupación del área por sus habitantes históricos, así como el plan de manejo responsable del espacio costero yla participación activa de la comunidad local. Como una muestra de positivismo jurídico, se desentiende de las luchas que las personas de Ostional han llevado a cabo para garantizar su permanencia histórica en la zona. Tampoco toma en consideración la presión ambiental que el avance de construcciones turísticas en destinos circundantes supone para el RVSO. Por último, y no por eso menos importante, envía un mensaje que desestima la urgencia de regular el uso del suelo en las playas guanacastecas,precisamente en una región que de manera continua se debaten los límites al desarrollo residencial costero.

La resolución de la Corte Suprema se da en un contexto institucional poco alentador para la democracia ambiental. Desde que el nuevo gobierno asumió funciones en mayo del presente año, el ministro de ambiente designado, Franz Tattenbach, está impulsando una reestructuración de la institucionalidad ambiental del país. De tal modo que “se recompongan y fortalezcan las competencias rectoras del ministerio”, propone el ministro. Según el comunicado oficial será necesario que se reduzcan a un grado mínimo de injerencia efectiva los once órganos desconcentrados que componen el organigrama institucional. Los órganos desconcentrados operan como brazos del ministerio en los territorios y responden a un estilo de gobernanza institucional basada en pesos y contrapesos. Entre ellos, el SINAC, responsable de la administración de las áreas silvestres protegidas in situ. La concentración de la toma de decisiones en la figura del ministro va de la mano de un recorte para el próximo año de casi dos millones de dólares para el SINAC. Ante este futuro escenario de reducciones presupuestarias, el ministro Tattenbach hizo la propuesta de dar en concesión privada las áreas silvestres protegidas. En declaraciones a la prensa afirmó: “La función de un parque es ser el motor de atracción de turismo para que beneficie a quien está alrededor, al sector privado que se beneficia de su buena gestión”.

Frente a este complicado escenario, se plantea una intención de concentrar las decisiones en la figura política del ministro, junto al anuncio de fuertes recortes y una tendencia hacia la opción de la administración privada de áreas silvestres protegidas, a lo que se suma la suspensión del plan de manejo del RVSO.

El Refugio de Vida Silvestre Ostional

El RVSO fue creado en 1983 mediante la Ley 6919 y forma parte del Área de Conservación Tempisque del SINAC. Comprende 510 hectáreas terrestres y 8.054 hectáreas marinas que se extienden a tres millas náuticas desde la costa. Colinda al norte con San Juanillo y al sur con Nosara. Su línea costera abarca once kilómetros, inicia en el cantón de Santa Cruz hasta llegar a las playas de Nosara en el cantón vecino de Nicoya. Se divide en cuatro sectores: sector marino; sector Ostional, el cual incluye el sitio principal de desove de tortugas Lora más 200 metros tierra adentro; sector de humedales-estuarios y finalmente, el sector Guiones que  incluye Playa Pelada-Playa Guiones.

Mapa de la RVSO. 

Los tres principios que rigen el RVSO son la conservación de las tortugas marinas y su hábitat de reproducción, la protección de los ecosistemas marinos costeros, y el uso sostenible de los recursos naturales por las comunidades organizadas y habitantes locales. El Refugio cuenta con un Consejo Asesor Interinstitucional (CIMACO) integrado por la Asociación de Desarrollo Integral de Ostional (ADIO), la Escuela de Biología de la Universidad de Costa Rica, la Asociación de Desarrollo Integral de Nosara (ADIN), la Asociación de Vecinos de Guiones Sur, la Asociación Cívica de Nosara, el SINAC y otras instituciones públicas en segundo orden de importancia para el manejo del refugio.   

El RVSO es uno de los modelos de gestión comunitaria de áreas silvestres protegidas más exitoso de Costa Rica, ya que articula los ejes económico, social y ambiental gracias a una organización comunal consolidada alrededor de la anidación de lasespecies de tortugas lora y baula. A lo largo de cada año el refugio recibe entre 80 mil y 270 mil tortugas marinas, las cuales pueden depositar entre 90 a 120 huevos por nido. Esta es la cantidad que permite su aprovechamiento controlado por parte de la comunidad a través del liderazgo de la ADIO que se encarga de organizar el cuido de las tortugas durante las arribadas, así como la extracción de los huevos. De las ganancias por la venta y comercialización de cada nueva arribada un 70% se reparte por partes iguales entre todos los socios de la ADIO y el 30% restante se destina a inversión y mejoras en infraestructura comunitaria. La comercialización a escala nacional se realiza mediante socios honorarios de la ADIO a lo largo del país que se encargan de recoger el producto empaquetado y certificado en la capital San José (ACT, 2017).

Los beneficios individuales a cada uno de sus asociados incluyen: ayuda económica para asistir a citas al hospital, ayuda monetaria para arreglo de casa en caso de daños, contratación de servicios funerarios, otorgamiento de becas a estudiantes de secundaria y el pago de una pensión a socios mayores de 70 años. Desde 1991, y con fondos provenientes de la venta de huevos, se instruyen a jóvenes de la zona para ser guías turísticos. El trabajo de los guías es controlar la entrada de turistas durante las arribadas y dar charlas a visitantes. Luego, en el año 2008, recibieron la acreditación oficial del Instituto Costarricense de Turismo (ICT) lo que les facilita participar en programas de formación, acreditación y reconocimientos internacionales (ACT, 2017). 

El RVSO y la comunidad que lo habita aparecen como un oasis de gestión local, planificación, presencia institucional asertiva, uso racional de los espacios y recursos costeros en una región que se caracteriza por todo lo contrario. De hecho, uno de los temas mas sensibles ha sido la inseguridad jurídica que garantice a sus habitantes su permanencia histórica en el sitio producto de vaivenes jurídicos. Por ocupar espacios trascendentales para la reproducción de la fauna marina como la Ley de Zona Marítimo Terrestre a lo largo de los años se han registrado episodios que merecen ser revisitados. Actualmente y producto del incisivo aumento de proyectos turísticos inmobiliarios en zonas aledañas a Ostional en los últimos añostambiénla sostenibilidad social y ambiental del refugio se pone en entredicho.    

Viejas y nuevas amenazas  

La sentencia de la Corte Suprema no deja sin efecto la constitución del RVSO como área silvestre protegida amparada por el Estado costarricense, pero sí  deja sin efecto el régimen legal especial para el uso de la tierra, el modelo de concesiones, eluso responsable y sostenible de recursos naturales, así comola seguridad jurídica para sus habitantes. El plan de manejo derogado es del año 2016 que, entre sus líneas más importantes, incluye la concesión hasta por veinticinco años más a toda persona que haya mantenido su residencia en la zona diez años antes de la entrada en vigor del plan de manejo. Además, se toma en cuenta todo paso de agua, esteros y manglares para a construcción de obras y casas de habitación.Se permite únicamente dar concesiones a actores externos que se dediquen a la investigación y ecoturismo bajo parámetros ya establecidos.

Imagen de Ernest Cañada | Alba Sud. 

Anterior al plan de manejo del 2016, desde el año 2008 la ADIO inició y lideró la propuesta de Ley de Territorios Costeros Comunitarios (Ley TECOCOS) en la Asamblea Legislativa (ACT, 2017). Esta ley tenía la intención de asegurar la tenencia de la tierra de comunidades costeras de todo el país frente a cualquier intención de desalojo por parte del Estado. Esto sería posible mediante la creación de una figura jurídica especial que restringía la venta y comercialización de terrenos costeros a otros que no fueran sus habitantes históricos. Facultaba la creación de consejos comunales costeros con voz y voto dentro de los municipios locales constituidos de manera que pudieran continuar y potenciar bajo un marco de protección jurídica actividades productivas tradicionales y nuevos emprendimientos sostenibles (Asamblea Legislativa, 2009). La propuesta contó con el apoyo de gran parte de las comunidades costeras del país aglutinadas alrededor del ya desaparecido Frente Nacional de Comunidades Costeras. En el año 2012 Alba Sud hizo un seguimiento de las marchas de poblaciones costeras a la Asamblea legislativa, condujo entrevistas a dirigentes del movimiento y realizó el documental Nuestras Costas que puso en perspectiva la propuesta de ley dado los privilegios a grandes inversiones turístico residenciales en playas de Costa Rica.

TECOCOS se fue difuminando con el paso del tiempo por no contar con los votos necesarios hasta quedar enterrado definitivamente en el año 2015. Según archivos legislativos y notas de prensa de la época TECOCOS llegó a tener el apoyo suficiente en la Asamblea para ratificar la propuesta de ley en el 2014. Sin embargo, en el último momento se dieron negociaciones entre la bancada mayoritaria, el Partido Liberación Nacional (PLN), y el diputado del Partido Movimiento Libertario (PML) Otto Guevara para que retiraran su apoyo. Entre las razones que Guevara y otros diputados del PLN expusieron para rechazar la Ley TECOCOS eran que “se establece un régimen diferenciado, que limita las actividades económicas posibles sobre restricciones al modelo de desarrollo económico de poblaciones costeras”, según dijo el diputado liberacionista Julio Rojas en un comunicado público en mayo de 2014.

Por su parte, el exdiputado Otto Guevara argumentó que su partido no solo se oponía al proyecto de ley porque “luchan contra más regulaciones y excesos de permisos”, sino que también en distintas oportunidades durante el debate legislativo en el 2014 señaló que “se opone a que los habitantes de zonas costeras, no puedan disponer del territorio en el que viven para lucrar con él, vendiéndolo o arrendándolo”. De hecho, Otto Guevara ha tenido un protagonismo inusual en la historia reciente de esta zona costera. Cinco años más tarde iba a utilizar los mismos argumentos para acuerpar al desarrollador inmobiliario estadounidense Jeff Grosshandler en su intención de detener regulaciones a nuevos desarrollos turísticos en la zona de amortiguamiento de siete kilómetros que separa el RVSO y Nosara. Las zonas de amortiguamiento son las áreas que se ubican entre los limites formales de un área protegida y asentamientos humanos. 

En el año 2019 la Municipalidad de Nicoya, la ACN y funcionarios del RVSO iniciaron el proceso de consulta comunal, estudios técnicos y redacción del “Reglamento para el otorgamiento de permisos de construcción en la zona de amortiguamiento del Refugio Nacional de Vida Silvestre Ostional”. El reglamento proponía lineamientos básicos de desarrollo urbano en la zona de amortiguamiento. Por ejemplo, altura máxima de construcciones, instalación de tanques sépticos, iluminación entre otros de modo que no afecte el ciclo de reproducción de las tortugas marinas. A pesar de que el reglamento entró a regir en febrero del 2020 una acción judicial de Grosshandler lo suspendió.  

Ostional. Imagen de Arturo Silva. 

Otto Guevara en ese momento no era diputado, pero era parte del equipo legal de Grosshandler. Estos argumentaron en rechazo al reglamento que atentaba contra el derecho a la propiedad privada.Guevara llegó a presentarse al Consejo Municipal de Nicoya en el cual expuso que: “(…) hay un interés de inversionistas nacionales y extranjeros de invertir (en Nosara). Ante esa situación absolutamente excepcional según lo que se está viviendo en el resto del país, ¿la Municipalidad de Nicoya quiere detener esos flujos de inversión? Ya en un artículo anterior habíamos tratado este episodio en detalle, en el cual retomamos la movilizaciones sociales y las discusiones que generó en la zona. 

El crecimiento de segundas residencias en la vecina Nosara ha provocado que la zona de amortiguamiento del refugio esté en peligro. De acuerdo con investigaciones del diario La Voz de Guanacaste hasta el 8 de octubre de este año, el 18% de todas las denuncias por invasión a áreas silvestres protegidas del país durante el 2022 provino solo de Nosara. Además, este crecimiento sin control ha provocado que exista un número insalubre de aguas residuales y bacterias fecales en el mar que baña esta costa (Bezy, 2022).

El reglamento a nuevas construcciones toma ahora mayor relevancia porque este fue redactado con base al plan de manejo del 2016 que anuló la Sala Constitucional. Es decir, en este momento el RVSO queda sin plan de manejo propio y tampoco protección para la zona de amortiguamiento. Por el momento no hay nada que haga pensar que la anulación del plan de manejo del RVSO y la suspensión del reglamento este relacionados. Aunque, como es costumbre en la provincia, de manera indirecta beneficia a desarrolladores inmobiliarios y afecta a habitantes históricos.   

A la espera de nuevas noticias

Como se apuntó al inicio, la Sala Constitucional aún no ha hecho pública la totalidad de la sentencia. De momento, los grupos organizados en Ostional y Nosara se han abstenido de hacer declaraciones públicas hasta conocer el detalle de la sentencia. Lo que seguiría en este caso es volver a iniciar la construcción de un nuevo plan de manejo para el RVSO que no tenga los vicios señalados y, de igual manera, un nuevo reglamento para nuevas construcciones costeras en la zona de amortiguamiento. Pero es poco lo que se puede afirmar hasta no conocer el contenido completo de la sentencia.

Al mismo tiempo no deja de ser cierto que el país y sobre todo su institucionalidad ambiental atraviesa fuertes ataques: pérdida de financiamiento para las personas encargadas de resguardar áreas silvestres o propuestas de mayor presencia del sector empresarial en el diseño de espacios turísticos en detrimento de participación y acción local. Veremos cómo avanzan las cosas y estaremos atentos.