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Reportaje | Turismo Responsable | México

15-12-2021

El Pueblo Mágico Zacatlán de las Manzanas: 10 años después

Erick David García González | Alba Sud

Desde su nombramiento como Pueblo Mágico, la turistificación de Zacatlán ha generado diversos cambios. ¿Cómo ha sido percibida esta transformación por sus residentes? ¿Hasta qué punto las políticas públicas han avanzado en términos de sostenibilidad? 


Crédito Fotografía: Russ Bowling, bajo licencia Creative Commons.

El Programa Pueblos Mágicos (PPM) es una política pública del gobierno federal mexicano que pretendía introducir el turismo como actividad para el desarrollo local de comunidades rurales. En la actualidad la entidad federativa de Puebla cuenta con 10 de los 132 sitios galardonados como Pueblos Mágicos en la república mexicana. Entre ellos, desde 2011, se encuentra Zacatlán de las Manzanas, enclavado en la Sierra Norte del Estado.

El pueblo está a una altura de 2500 msnm y cuenta con un clima templado subhúmedo. Tiene una población de más de ochenta mil personas.Tradicionalmente se orientó hacie el comercio y la agricultura. Desde la década de los años cuarenta del siglo pasado se celebra una feria en la que la manzana, al ser un fruto de gran relevancia para la región, es la temática principal. Esta celebración motivó que, al menos una vez al año, Zacatlán recibiera turistas de distintas partes.

Con el paso de los años, un grupo de empresarios y gestores locales, al considerar que Zacatlán contaba con más y diversos atractivos bioculturales (como la sidra artesanal, un exconvento franciscano, un museo del reloj, un valle con formaciones rocosas, entre otros), comenzaron a fomentar la actividad turística en el municipio y vieron en el PPM una oportunidad para conseguir mayores beneficios e impulsar el interés por el turismo en la comunidad. Tras diversos esfuerzos por conseguir el nombramiento, Zacatlán de las Manzanas fue galardonado como Pueblo Mágico en 2011.

La inclusión de Zacatlán en el PPM generó diversos cambios en la localidad. Tal fue el interés de los gestores e inversionistas locales en incentivar la actividad turística en Zacatlán que, a sólo un año de recibir el nombramiento, lograron duplicar el número de visitantes. Por esta razón la Secretaría de Turismo del país también le otorgó el premio al “Mejor Pueblo Mágico de México” en 2012. 

Si bien se puede argumentar que el éxito del PPM deriva del incremento de visitantes que, a su vez, producen ingresos y empleos para localidad, sus efectosno son exclusivamente positivos ni meramente de carácter económico. Pero, ¿qué opinan sus residentes sobre los cambios que ha generado el Programa en su comunidad?

Impactos económicos, distintas perspectivas locales

Se percibe un sentimiento general por parte de los residentes con ocupaciones que no se vinculan directamente al turismo que asevera que las personas que realmente se benefician del Programa son los dueños de los hoteles y restaurantes ubicados en la cabecera municipal. Aunado a ello, consideran que como el turismo llega con una predisposición a gastar, diversos negocios locales se aprovechan de la situación para encarecer los precios de insumos como alimentos, medicinas, o rentas de casa habitación. Por ello, para Esteban [1],taxista de la localidad, el PPM ha significado “beneficio para unos, costo para otros”.

Fuente: Russ Bowling, bajo licencia Creative Commons.

Este sentimiento perdura en las personas de comunidades que pertenecen al municipio, pero que viven aledañas al centro, ya que como expresa Maricela, estudiante universitaria, y muchos otros residentes entrevistados, “solamente los residentes del centro y que tienen comunicación con el Ayuntamiento y con la dirección de turismoson quienes reciben los beneficios.Incluso Lorena, quien tiene una cafetería en el centro reconoce esta situación, cree que debería haber un mayor beneficio para las demás comunidades y “no nada más el puro centro sino extenderse, porque eso es otra cosa, todo lo queremos acá, todo para el centro”.

Además, se percibe por parte de los residentes cierta dependencia hacia el turismo. Esta se volvió aun más notoria tras la crisis por la pandemia COVID-19, ya que, por un lado, causó el cierre permanente de varias empresas dedicadas al turismo y, por el otro, como indica Marlene, quien es miembro del comité local de Pueblos Mágicos [2], forzó a algunos locales a seguir recibiendo turismo a pesar de la crisis, lo cual causó el descontento de otros residentes y provocó, en sus palabras, cierta “turismofobia”.

Impactos socioculturales múltiples

La centralización y dependencia hacia el turismo ha desencadenado también otros efectos en la esfera social. Por un lado, gestores locales, así como civiles entrevistados, opinan que el programa ha fomentado en los residentes de Zacatlán un sentimiento de orgullo a partir de la preservación y revalorización del patrimonio biocultural. Incluso se ha logrado, como indica Raymundo, un miembro del comité, “identificar esas cosas que nos hacen Zacatlán y compartirlas con el turista”. Por el otro lado, la exacerbación del patrimonio local considerado como “mágico”, en atención a los lineamientos de permanencia en el Programa, irónicamente ha conducido a una homogenización del paisaje, que se refleja en éste y otros destinos con nombramiento vigente.

Otro de los principales efectos sociales que la comunidad de Zacatlán ha detectado a partir del nombramiento es la saturación del espacio público. La actividad turística ha causado un exceso de personas transitando en la cabecera municipal. “Ahorita si vamos al centro, ya es mucha la gente que te encuentras ahí, casi no puedes caminar y está muy saturado”,comentó Maricela, una estudiante universitaria que lleva más de veinte años viviendo en Zacatlán y es testigo de los cambios que ha sufrido el pueblo en los últimos tiempos.

El incremento poblacional residente y flotante, ha aumentado a su vez la delincuencia, pues, desde la perspectiva deLuisa, quien es guía de turistas y tiene 21 años en la localidad, “ahora va uno y tiene que andarse cuidando de que no vaya a ser que lo vayan a asaltar”.Incluso Fernando, un miembro del Comité, expresó que por el turismo “se empieza a mover dinero y viene gente que no está acostumbrada a trabajar y viene a robar, aumenta la inseguridad, aumenta la delincuencia y los robos”.

Otro impacto percibido se manifiesta a partir del control de los espacios para aprovechamiento turístico, ya que los vendedores ambulantes requieren de un permiso del ayuntamiento para poder promocionar sus productos en la cabecera municipal. “Las personas que acuden a vender en algunos de estos lugares pues si les está costando porque tienen que estar registrados y hacer sus trámites para poder vender, no cualquiera lo puede hacer”, explica Antonio, quien trabajó en el ayuntamiento municipal por tres años.

El control del espacio también ha condicionado a vendedores de localidades colindantes a la cabecera de Zacatlán (principalmente de pueblos originarios) a portar un traje típico mientras realizan sus ventas. “El gran beneficiario era uno que se metía a la Sierra y contrataba a la gente explotar su pobreza e imagen de lástima para que les compraran cosas”,reconoció David, un ex director de turismo de la localidad; lo que se traduce en una dinámica de mercantilización de la cultura local, que además ayuda a preservar un imaginario sobreestos grupos sociales.

Impactos ambientales

A partir del alza en la afluencia de visitantes por la entrada en vigor del PPM, es notorio el incremento de residuos sólidos en vías públicas de la cabecera municipal. Fernanda, estudiante de turismo y habitante local, reconoce que antes “no se veía tanto como ahorita, pues en el centro cualquiera [refiriéndose a los turistas]tira su basura”.

El incremento poblacional a su vez ha fomentado la desorganización en la gestión de los espacios de vivienda, así como irregularidades en el uso de suelo del municipio, poniendo a veces lotes a la venta sin servicios de agua o luz. Como explica Yahir, un ex miembro del comité de Pueblo Mágico, “con la complicidad de la dirección de desarrollo urbano y el sistema operador de agua potable, quienes tienen que dar una factibilidad de uso de suelo, y se las dan a cambio de que en ese fraccionamiento nuevo que van a hacer, les regalan un lote”, y en ocasiones utilizan espacios que en principio deberían estar destinados para uso agrícola o forestal.

Reflexiones en torno a las realidades de Zacatlán

Aunque el PPM surge en principio como una política pública cuya finalidad era impulsar la pluriactividad a favor del desarrollo de las comunidades de carácter rural tras la crisis agraria sufrida en América Latina a finales de los años noventa, la experiencia de Zacatlán (así como la de muchos otros destinos con este nombramiento) evidencia una tendencia hacia la hegemonía de la actividad turística en la que solo una minoría de los locales resultan directamente beneficiados. Ante este escenario, urge replantear los planes de acción de ésta y otras localidades, de manera que existan esfuerzos por incluir la participación y perspectivas de otros actores involucrados, que además tengan una influencia real y tangible (no discursiva) en la toma de decisiones y en la repartición equitativa de beneficios. Esta perspectiva, además, es especialmente relevante por cuanto el modelo del Programa ha tendido a replicarse en otros países con políticas públicas similares.

Fuente: Erick García, bajo licencia Creative Commons.

Si bien este Programa se promovió con los principios de un turismo alternativo con la finalidad de fomentar la sostenibilidad, éste y muchos otros pueblos mágicos replican los mismos efectos negativos que por décadas han sido enunciados en la literatura sobre el turismo de masas, como dependencia económica hacia el turismo, homogenización del paisaje, saturación del espacio público, gestión inadecuada del recurso biocultural, entre otros (Mason, 2008; Sancho,2008). Esto pone en discusión los alcances de éste y otros programas similares, así como el significado que la palabra sostenibilidad adquiere, pues aparenta servir a la reproducción del capitalismo (Cañada y Murray, 2019), siendo su única preocupación replicar el discurso de agendas internacionales sin atender problemáticas locales en profundidad.

En ese sentido, se requiere de buscar alternativas que vayan más allá de una justificación del beneficio turístico basada en los ingresos locales generados y el número de turistas recibidos al año. Deben reconocer la complejidad que supone el desarrollo del turismo; así como procurar concientizar sobre las especificidades de cada contexto y las necesidades de sus habitantes (Cañada, 2021).

 

Notas:
[1] Se han utilizado pseudónimoscon el fin de mantener el anonimato de los entrevistados y cumplir con el protocolo de confidencialidad.
[2] Los miembros del comité local de Pueblos Mágicos, son residentes locales que no cuentan con algún cargo público y cuyo fin es contribuir con la observación del cumplimiento de los lineamientos de permanencia en el programa.
Referencias:
Cañada, E. (2021). Retos para una transformación del turismo con perspectiva de justicia global. Alba Sud, 19/11/21.
Cañada, E. y Murray, I. (Ed.). (2019). Turistificación global: Perspectivas críticas en turismo. Barcelona: Icaria Editorial.
Mason, P. (2008). Tourism: Impacts, planning and management. Londres: Butterworth-Heinemann.
Sancho, A. (2008). Introducción al Turismo. Madrid: Organización Mundial del Turismo.
Este artículo se publica en el marco del proyecto “Plataforma de recerca en turisme, drets humans i equitat de gènere sobre Amèrica Llatina. 2a Fase”, ejecutado por Alba Sud con el apoyo de la ACCD (convocatoria 2020).