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07-12-2023

La Economía Solidaria como eje de los estudios universitarios en Turismo: la propuesta de la UNTREF

Gema Martínez-Gayo | Alba Sud

En los últimos años han surgido debates cuestionando el contenido y el enfoque de la formación universitaria en Turismo. En este caso, analizamos la propuesta de la Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTREF) para incorporar una orientación de estos estudios con la Economía Solidaria.


Crédito Fotografía: Julia M. Cameron, bajo licencia creative commons.

La Economía Solidaria considera que la economía actual ha desatendido los compromisos éticos y sociales y ha dañado el medio ambiente. También que ha empeorado la calidad de vida de numerosas personas a través del incremento de las desigualdades sociales, de las tasas de pobreza, de la extensión de la precariedad laboral o de las cifras de exclusión social (Ballesteros García, 2004). De ahí que sea necesario un cambio para llevar a cabo formas de gestión alternativas a las desarrolladas por la producción capitalista (García y Rofman, 2013).  La Economía Solidaria se convierte así en una herramienta para lograr que la sociedad sea más justa, a través de poner a laspersonas como protagonistas del desarrollo, de la colaboración yde desterrar aquella visión de que lo más importante es la maximización del beneficio individual (Ballesteros García, 2004; García y Rofman, 2013).

El origen de la propuesta

Argentina presenta una importancia creciente del turismo solidario, por ejemplo, el caso de mutuales, cooperativas, organizaciones indígenas y campesinas, entre otras. Estas son propuestas para desarrollar un turismo que tenga cuenta un reparto equitativo, un mayor respeto por el medio ambiente y una gestión más democrática.  Aspectos que han cobrado aún más importancia a raíz de la COVID-19 y que han supuesto un cuestionamiento del desempeño del sector turístico y de las consecuencias de este para la ciudadanía (Fernández Miranda, 2021). Rodrigo Fernández Miranda, codirector y docente de la Licenciatura en Turismo con orientación en Economía Solidaria, codirector del Centro de Estudios de la Economía Social, que trabaja y participa en organizaciones de la Economía Social y Solidaria desde 2004 y es colaborador de Alba Sud, lo describe así: “La Economía Social y Solidaria en Argentina es una construcción creciente, en cantidad y diversidad, que se está fortaleciendo en términos de integración política y económica. Y justamente lo que busca este turismo es salir a disputar una actividad central para el desarrollo económico del país, es decir, y en la medida en que tenga mayor presencia, mayor pujanza, esta correlación de fuerzas el turismo solidario más va a tender a ser inclusivo”.

Turismo Campesino en Salta, imagen de Red Argentina de Turismo Rural Comunitario. 

El interés por dotar a una titulación de esta orientación a la Economía Social nace de la implicación del Centro de Estudios de la Economía Social (UNTREF), que es un centro académico muy vinculado con el territorio y las organizaciones del campo, ejes estratégicos de la economía social y solidaria. Y también, de la realización de diversos estudios a través de Alba Sud, donde se analizó la composición y características del turismo social y solidario en Argentina. La UNTREF tenía una reciente Licenciatura en Turismo, y de ahí surge el acuerdo entre el Centro de Estudios y la Licenciatura para darle transversalidad. Con la implantación de la Licenciatura en Turismo Virtual de la Universidad Tres de Febrero se abre la oportunidad, tal y como describe Fernández Miranda, de poder desarrollar una propuesta de “enriquecer el turismo con una mirada no dominante, digamos fuera del mainstream”. Esto favoreció una articulación formal de los estudios y unos diálogos para lograr transversalizar los contenidos de la economía social y solidaria en la Licenciatura de Turismo Virtual, algo que le dota de un componente novedoso y diferenciador.

Se gesta así una nueva orientación para la Licenciatura de Turismo que hará que todas las personas egresadas cuenten también con ese tipo de formación. Esta junto con la Tecnicatura, servirán de base para otro tipo de formaciones complementarias más breves, de unos meses, que seguirán también esa guía. La Licenciatura proporcionará las salidas habituales que tiene cualquier titulación de Turismo, pero se añadirán aquellas oportunidades laborales que ofrecen lasorganizaciones cooperativas, mutuales y de base comunitaria, de manera que se formarán a tituladas y titulados turísticos capaces de prestar servicios más especializados a estas entidades. Además, de tal y como apunta el propio Rodrigo Fernández Miranda, se quieren aportar profesionales queincorporen esa mirada de la economía solidaria y personal investigador turístico que pueda incrementar conocimiento sobre el campo del turismo solidario.

La Economía Solidaria en el currículo formativo

Los cambios más significativos consistirán en añadir asignaturas específicas y nuevos contenidos a las ya existentes, referentes a la Economía Solidaria. Para ello, se ha optado por incluir en el equipo docente, y colaborador, a profesionales con amplia experiencia en el saber hacer de las comunidades en materia turística (Fernández Miranda, 2021).

Tendríamos así asignaturas troncales como Derecho o Patrimonio a las que se añadirían contenidos, materias optativas como Turismo Social que pasaría al grupo de disciplinas troncales y nuevas asignaturas como las de Turismo desde la Economía Social y Solidaria y Planificación de proyectos asociativos del turismo. Estas dos últimas serán impartidas por Rodrigo Fernández Miranda y Ramiro Ragno, donde el primero incidirá en la parte más teórica y conceptual mientras que el segundo la parte más práctica y de acción participativa territorial, relata el codirector.

Por ejemplo, en Planificación de proyectos asociativos uno de sus docentes, Ramiro Ragno, es ingeniero en Recursos Naturales y Medio Ambiente y está especializado en Turismo Comunitario, Economía Social y Solidaria.  Ha sido parte del proceso de conformación de emprendimientos de turismo de gestión comunitaria, es técnico territorial del Instituto Nacional de Agricultura Familiar Campesina e Indígena (INAFCI), forma parte del equipo técnico de la Fundación Buenavida y colabora con Alba Sud. Asimismo, es importante destacar su participación en el equipo técnico de la Red Argentina de Turismo Rural Comunitario (RATurC) que agrupa organizaciones campesinas e indígenas del país y defiende, capacita y promueve emprendimientos colectivos de gestión comunitaria en el sector turístico (Ragno, 2022). Por lo que conoce de primera mano las modalidades de gestión y distribución de ingresos en los movimientos colectivos, cómo se crean mecanismos para activar los turismos de proximidad y cómo diseñar e implementar propuestas turísticas a medida. Tal y como describe el propio Ragno, en declaraciones a Alba Sud:“La Economía Social potencia el trabajo colectivo y la reciprocidad y activa el trabajo cooperativo y comunitario con identidad, dando valor a los entramados locales con inclusión social para no dejar fuera a nadie; de este modo una empresa social se transforma en un prestador de servicios y actividades turísticas y en un actor en la cadena de valor del turismo social generando oportunidades de viaje a viajeras y viajeros de proximidad y diversificando e interpelando a favor de otros turismos”.  Esas herramientas y modos de gestión local de la oferta turística, que han sido creadas con las organizaciones, no aparecen comúnmente en la literatura disponible y es difícil saber cómo implementarlas. Por lo que esta asignatura puede acercar al estudiantado a estos aspectos menos conocidos de la Economía Solidaria.

Imagen de la Red Argentina de Turismo Rural Comunitario. 

Esa experiencia práctica en el trabajo con comunidades hace que conozca las vicisitudes de la implantación de esos procesos turísticos, y dota de una visión más amplia a la formación turística: “Mi aporte me viene de la experiencia de acompañar procesos en territorio conformando emprendimientos comunitarios y cooperativos, sufriendo en primera persona los tropiezos y crisis internas de cada organización, disfrutando los éxitos del trabajo colectivo como propios, celebrando la activación de los esperados ingresos económicos y festejando los comentarios positivos de turistas satisfechos, a la vez que impulsamos siempre las alianzas intersectoriales público privadas en la construcción de redes, y esa humilde senda deseo compartirla y seguir aprendiendo con el mundo del turismo y de la Economía Social”, afirma Ramiro Ragno.

Además, también existirán asignaturas optativas que pueda escoger cada estudiante, y que se relacionan con el turismo de base comunitaria. Pero siempre teniendo en cuenta que el contenido debe adaptarse a los cambios en la sociedad, Fernández Miranda lo explica así: la idea de “proceso vivo” a partir de esta base introducir nuevos autores, nuevos contenidos, por lo pronto estamos trabajando en un campo demasiado incipiente, entonces cada acción nos retroalimenta”.

Investigación y contacto con la realidad

Otra de las asignaturas será Introducción al Análisis del Patrimonio Natural, donde se pretende “romper con la idea, muchas veces ya naturalizada, de que cualquier patrimonio es un recurso turístico. En realidad, hay patrimonios que no son turísticos; y atractivos turísticos que no necesariamente son patrimonios dado que no remiten a la identidad social de ningún grupo” tal y como afirma su docente, Elisa Lacko. Además de impartir esa asignatura, es Licenciada en Turismo, egresada de la carrera de Antropología, Maestranda en Políticas Ambientales y Territoriales, investigadora del Instituto de Ciencias Antropológicas de la Universidad de Buenos Aires (ICA-UBA) y técnica de la Fundación Buenavida, especializada en turismo rural comunitario. Comparte la docencia de esta asignatura con Carolina Gómez que es Licenciada en Turismo, Magíster en Antropología Social y promotora asesora de un grupo de cambio rural de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria. INTA, también, con Joaquín Testa que es Licenciado en Turismo, Magíster en Políticas Ambientales y Territoriales e investigador de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMDP) especializado en el estudio de la gestión turística ambiental de destinos litorales de sol y playa.

En la asignatura se trabaja conceptualmente las ideas de naturaleza a lo largo del tiempo hasta llegar a la problemática ambiental actual.  En este sentido, se pretende dar cuenta decómo se llevan a cabo los procesos de patrimonialización en función de las valoraciones que la sociedad hace de ciertos atributos de la naturaleza o el ambiente en una determinada época. Es decir, que entre destacar a un lugar por ciertos atributos valorados socialmente y llegar a convertirlo en patrimonio turístico, media un proceso que implica el involucramiento de diversos actores con intereses disímiles que promueven su turistificación y que no siempre está exento de conflictos. Por esto, en esta asignatura se analizan las imágenes turísticas de distintos destinos,en diversos momentos históricos ysu evolución, para identificar luego las valoraciones e ideas de naturaleza/ambiente que las sustentan y les dan sentido, describe Lacko.  

Lo que se va a intentar es que, el estudiantado, adquiera un perfil investigador, tal y como explica la docente en declaraciones a Alba Sud: “me parece que es muy importante poder discernir entre el discurso político de los planes, programas y proyectos de lo que es analítico. Porque muchas veces, en turismo, se suele repetir lo que dicen los instrumentos de política, pero los análisis pueden carecer de profundidad si se desconoce el contexto de producción de tales discursos. Por suerte esta situación va cambiando con el aumento de la producción de trabajos académicos con nuevos enfoques teóricos. Es importante identificar a los actores que promueven los procesos de patrimonialización de espacios naturales y a quienes se ven afectados por ellos en el territorio, como así los intereses que los guían. Puede ser el Estado (en sus distintos niveles) pero también hay otros actores como empresas, ONGs,los propios turistas o lugareños que los promueven, por lo cual es importante profundizar y poder atender a la complejidad de los mismos, a las relaciones de poder existentes entre los actores, los conflictos de intereses existentes y revelar qué hay detrás de cada uno de ellos en cada contexto histórico particular”.

Uriberralea. Imagen de José Carrizo. 

En las asignaturas de Patrimonio también se trabajarácon organizaciones sociales para que el estudiantado pueda acercarse a experiencias concretas en el territorio.Lacko destaca la importancia que docentes y técnicos territoriales estén en ambos espacios y que participen en los conversatorios organizados desde la titulación en la Universidad. Entre las personas invitadas, las cuales cambian de año a año, se encuentran técnicos de Parques Nacionales, de la Fundación Buenavida, del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y académicos especializados en la materia que trabajan con metodologías participativas en diversos proyectos y se incluye la perspectiva de género.  También se ha invitado a emprendedores y a referentes y autoridades de comunidades indígenas que habitan áreas naturales protegidas para que presenten sus perspectivas de la naturaleza/ambiente y compartan sus experiencias con relación al turismo.Estos encuentros, al ser una formación virtual, se llevan a cabo de manera sincrónica, lo que facilita el intercambio de experiencias y han tenido muy buena acogida entre el estudiantado, lo que ha generado debates. Las ventajas que esto tiene son descritas por la docente: “Les va a aportar pues una mirada crítica, más analítica, herramientas metodológicas para acercarse al campo y a los actores. Creo que es una asignatura que quizás les abre un poco la idea de que, la carrera turismo, no sólo es para trabajar en la actividad privada, la gestión o en cooperativas, sino que también requiere de teoría, que es también un tema académico y que, sin duda, por su importancia, requiere de mayor profundidad en su estudio”.

Otra forma de estudiar turismo

La universidad pública intensifica así su interés y compromiso con los territorios y sus realidades. Lo hace a través de una propuesta formativa que conecta las comunidades con un turismo más consciente de las necesidades sociales, y que aporta las herramientas necesarias para favorecer el desarrollo local desde una perspectiva más inclusiva. Esta transformación de la visión del turismo más tradicional incorporará elementos más éticos, participativos y de reciprocidad, todos ellos vitales para lograr un desarrollo más justo y sostenible(Fernández Miranda, 2021).

 

 

Entre los aportes de esta Licenciatura, Ramiro Ragno incide en la inclusión de unos valores y principios de la Economía Social donde la organización democrática, la cosmovisión local y la toma de decisiones colectivas también pueden ser compatibles con la generación de ingresos de manera colectiva, la autenticidad de experiencias turísticas y la calidez y calidad de la oferta. Esto da lugar a un proceso participativo de inclusión social, comprendida como la capacidad de incorporar en el proceso turístico a sectores muchas veces marginados o excluidos o ajenos a la actividad, que favorecen a la diversificación de la oferta y construyen pertenencia y empleo. “Hay una relación de inclusión cuando rubros productivos no tradicionales se suman a la oferta turística y el destino los reconoce, cuando las y los turistas son vecinos del mismo territorio y se dan la oportunidad de reconocerse en el otro, cuando los clientes que viajan son cooperativistas o centros de estudiantes o jubilados, cuando el turismo es un espacio de encuentro entre pueblos originarios y compatriotas urbanos, cuando se generan redes entre pares, cuando estos emprendimientos sociales ocupan lugar en las mesas de gestión y en las cámaras empresariales, o cuando se generan políticas públicas que impulsan estas tipologías turísticas”, narra Ragno.

Capilla del Monte, imagen de Valeria Laborda. 

Por su parte, Elisa Lacko destaca que con esta carrera se recupera una necesidad social y la interpreta, llena así un espacio vacío en este tipo de formación que incorpora a estos grupos con voluntad de organizarse. Además, esto viene respaldado por el gran interés que hay en la Diplomatura y también por la Licenciatura, donde el estudiantado se muestra muy receptivo a este tipo de contenidos: “Hoy en día hay gente que se está preguntando qué es el turismo desde nuevas perspectivas y quiénes pueden practicarlo… por qué hay unos que sí y otros que no, cómo lograr que la práctica turística incluya a otras personas. Empieza a aparecer gente con otras inquietudes. Pensar en un turismo no depredador, de escala humana… pensar otro modelo, ojalá pensar en otro modelo de desarrollo que incluya otras dimensiones humanas y no dar por sentado de que hay un único desarrollo posible”, apunta la docente.

En ese mismo sentido de modificar la visión tradicional del turismo, se pretende dotar a las egresadas y egresados de una mirada más amplia y plural de esta actividad. “Necesitamos una universidad pública que problematice las formas dominantes de turismo y que también abra camino a aspirar a nuevas experiencias y discursos que son emergentes en el campo del turismo” señala Rodrigo Fernández Miranda. Para el codirector resulta clave que la propuesta educativa reúna diversas miradas y percepciones, y que no se limite a ser un reproductor acrítico de los discursos dominantes, a los turismos capitalistas. Esto también servirá para formar profesionales que puedan transformar la realidad de este tipo de organizaciones, con una buena formación que posteriormente puedan ofrecer servicios turísticos de calidad, reconocidos, con un vínculo con la sociedad y sin condiciones de precariedad. También que se incorporen a la carrera investigadora profesionales que estudien cuestiones poco analizadas del turismo, y que cuenten con las herramientas para acercarse a la realidad de la Economía Solidaria con una buena base. Y, por supuesto, continúa Fernández Miranda: “generar profesionales de turismo que, aunque se dediquen a trabajar en un hotel multinacional por lo menos que conozcan que hay otras formas de hacer turismo, que no salgan de la carrera pensando que hay un turismo, que también hay otras miradas, otras concepciones, que tienen otra forma de construir la actividad turística”.

 

Referencias:
Ballesteros García, Carlos (2005). La Economía Solidaria. Empresas y economía al servicio de las personas. icade. Revista cuatrimestral de las Facultades de Derecho y Ciencias Económicas y Empresariales, (64), 191-212.
García, Ariel y Rofman, Alejandro (2013). Economía solidaria en Argentina. Definiciones, experiencias y potencialidades. Atlántida. Revista Canaria de Ciencias Sociales, (Número Extra), 99-117.
Fernández Miranda, Rodrigo (17 de enero de 2021). La Universidad piensa los turismos posibles y necesarios. TERMINALES. El blog de Rodrigo Fernández Miranda.
Ragno, Ramiro (15 de diciembre de 2022). ¡La Red Argentina de Turismo Rural Comunitario avanza!TURISMO, COMUNIDADES Y BUEN VIVIR. El blog de Ramiro Ragno.
Este artículo se publica en el marco del proyecto “Reactivació turística post-COVID19: alertes contra l’increment de desigualtats globals. 2a Fase: propostes”, ejecutado por Alba Sud con el apoyo de la ACCD (convocatoria 2022).